Redacción Marlone Serrano
En un partido lleno de emociones y destellos de futuras estrellas del fútbol mundial, España y Brasil firmaron un empate 3-3 en un amistoso realizado en el Estadio Santiago Bernabéu, en Madrid, con un trasfondo de lucha contra el racismo. La noche dejó claro que el talento joven tiene mucho que ofrecer, con Lamine Yamal de España y Endrick de Brasil robándose el protagonismo en un escenario donde incluso Vinícius Junior, figura habitual del Real Madrid, pasó a un segundo plano.
La Seleção logró remontar un marcador adverso con un golazo de Endrick, la joven promesa del Palmeiras que se vestirá de blanco en Madrid al finalizar la temporada. Por su parte, España contó con la brillantez de Yamal, quien con solo 16 años ya muestra destellos de calidad en el Barcelona y en esta ocasión contribuyó en la preparación de los tres goles de su equipo.
El encuentro comenzó con España tomando la delantera gracias a un penalti convertido por Rodri, luego de que Yamal fuera derribado en el área. Brasil, por su parte, no se quedó atrás y, tras ir perdiendo por dos goles, logró igualar el marcador con Endrick como uno de los anotadores.
El partido se tiñó de drama hacia el final, cuando un penalti convertido por Lucas Paquetá en el tiempo de descuento selló el empate para Brasil, justo después de que España, mediante otro penalti de Rodri, parecía llevarse la victoria.
Más allá de los goles y las jugadas destacadas, el encuentro "Una Piel" se convirtió en un poderoso mensaje en contra del racismo, con Vinícius recibiendo un cálido aplauso al ser sustituido, un cambio respecto a los abucheos previos a su nombre antes del inicio del partido. En esta ocasión, tanto Yamal como Endrick brillaron y mostraron que el futuro del fútbol está en buenas manos, prometiendo emociones y talento por desbordar en los próximos años.