Por si no bastara, el velocista italiano impuso un nuevo récord europeo en los Juegos Olímpicos de Tokio al detener el reloj en 9 segundos y 80 centésimas.
El italiano Lamont Marcell Jacobs dio la gran sorpresa en la prueba reina de la velocidad del atletismo, al ganar la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Tokio, para convertirse en el sucesor del mítico Usain Bolt, quien fue campeón olímpico en las ediciones de 2008, 2012 y 2016.
Por si no bastara, el velocista italiano impuso un nuevo récord europeo en los Juegos Olímpicos de Tokio al detener el reloj en 9 segundos y 80 centésimas.
A Lamont lo acompañaron en el podio el estadunidense Fred Kerley (9.84) y el candiense André De Grasse (9.89).
La medalla de oro conseguida por Lamont cobró mucha mayor relevancia debido a que es la primera que un atleta europeo gana desde 1992 en dicha disciplina.
La última vez que Europa tuvo un campeón olímpico en los 100 metros planos fue en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 con el británico Linford Christie que ganó el oro.
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