Redacción: ANCOP Sports
En un día lleno de emociones y nostalgia, Juan Román Riquelme, el ídolo indiscutible de Boca Juniors, tuvo su merecida despedida en la Bombonera. El evento reunió a excompañeros, entrenadores y fanáticos que se congregaron para rendir tributo a la brillante carrera del talentoso futbolista argentino.
El momento más esperado fue el reencuentro entre Riquelme y su mentor, el legendario entrenador Carlos Bianchi, quien fue fundamental en la formación y el éxito del futbolista. Durante años, Riquelme ha elogiado a Bianchi, refiriéndose a él como un "padre futbolístico" y reconociendo su papel en la transformación de Boca Juniors en un equipo ganador. La última vez que ambos compartieron un campo de juego en la Bombonera fue el 11 de mayo de 2014, un día que quedó grabado en la memoria de los aficionados.
El encuentro no solo fue significativo para Riquelme y Bianchi, sino también para otros excompañeros de Boca Juniors que se unieron a la celebración. Óscar Córdoba, Pato Abbondanzieri, Hugo Ibarra, Jorge Bermúdez, Walter Samuel y muchos más estuvieron presentes para expresar su admiración y afecto hacia el talentoso mediocampista.
Durante el homenaje, se recordaron los logros más destacados de Riquelme y Bianchi en Boca Juniors, incluyendo la triple corona en el año 2000 (Copa Libertadores, Apertura y Copa Europeo-Sudamericana) y la Copa Libertadores en 2001. Riquelme conmovió a Bianchi y a todos los presentes al afirmar que el éxito del equipo era gracias a su entrenador, quien les enseñó a competir y a ganar.
El partido de despedida contó con la participación de varios exjugadores de Boca Juniors, quienes formaron parte del equipo inicial dirigido por Bianchi. La presencia de estos ídolos del club evocó recuerdos de momentos inolvidables y reafirmó la importancia de Riquelme en la historia del equipo.
El evento también contó con la presencia de otros entrenadores y figuras destacadas en la carrera de Riquelme, como José Pekerman, quien lo entrenó en el seleccionado Sub 20, y Gabriel Milito, quien disfrutó del éxito de Riquelme y ahora se destaca como entrenador en la Liga Profesional.
La despedida de Juan Román Riquelme fue una fiesta llena de emociones y gratitud hacia el legado que dejó en Boca Juniors. Su habilidad, liderazgo y amor por el club lo convirtieron en un verdadero ícono del fútbol argentino. A través de su magia en el campo y su pasión por el juego, Riquelme inspiró a generaciones de futbolistas y dejó una huella imborrable en la historia del deporte.
Ahora, Riquelme inicia un nuevo capítulo en su carrera como dirigente de Boca Juniors, asumiendo el desafío de continuar el legado y llevar al club a nuevas glorias. Su despedida fue un momento para agradecer su dedicación y devoción al fútbol, y para recordar con cariño los momentos inolvidables que vivió junto a sus compañeros y fanáticos. Juan Román Riquelme siempre será recordado como una leyenda de Boca Juniors, cuyo impacto trasciende las fronteras del deporte.